miércoles, febrero 22, 2012

El Milagrero Mayor

En Serio:


Quienes están deseando que a HCh se lo lleve el cáncer para no enfrentarsele y derrotarlo en vida, no deben ignorar que su muerte de esa forma tan inmerecida, por lo que tiene de lucha personal y heroica para su sanación, lo haría inmortal y pronto veríamos su
maléfica efigie adornando los fanatizados pechos de todo progue izquierdoso seudorevolucionario latinoamericano, intelectualucho europeo y comunistoides capitalistas gringos tipo Sean Penn. 









Menos Serio:
Lo veríamos tambien en el altar del santuario de la "Corte Malandra" como la Deidad Mayor dejando al triunvirato del Santerismo, conformado por María Lionza, Negro Felipe y Guaicaipuro, del culto "maria lioncero", como devaluados sargentuchos y al pobre "Malandro Ismael" y a sus compinches como simples muchachos de mandados. Todos a la orden, claro, de la Superioridad Santera y Malandrosa del "Golpista que Camina". Hasta que se arrechen por que no cumpla ninguno de los llamados "graciasmicomandanteporlosfavoresrecibidos" y lo saquen a plomo limpio sin esperar elecciones ni un carajo.











Bajo el inclemente sol que azota al Cementerio General del Sur, lleno de maleza y escombros, un santero fuma un tabaco mientras balbucea frases breves sobre la vida de Ismael, un antiguo delincuente a quien ahora se le conoce como el “santomalandro”.Un tatuaje que tenía Ismael _un halcón en una motocicleta_ es el símbolo de los devotos de la Corte Calé o Corte Malandra, conformada también por “Malandro Ratón”, “Isabelita”, “Luis”, “Miguelito”, “Antonio” y otros antiguos malhechores que vivían en barrios pobres.
“El culto se inicia con Ismael, quien fue un malandro que en sus tiempos robaba a los que tenían, para ayudar a los que vivían en su comunidad”, dice Yamileth, vendedora en una tienda de objetos espirituales y devota de Ismael.
Pero este “santo” y sus compañeros son buscados como guardianes contra la delincuencia y la maldad.
“No solamente nos ayudan para que no nos roben, para que protejan el negocio, sino que también son entidades que nos pueden ayudar en la la evolución, aconseguir empleo”, dice la joven, quien participa en sesiones espiritistas donde afirma se le han “manifestado” miembros de la corte.
Los creyentes sostienen que los fallecidos delincuentes buscan reivindicarse alejando del mal a quienes andan en actividades ilícitas.
“Como él ya estuvo en esa vida de malandro, pienso que puede ayudar a muchos a salir de ese mundo”, dijo Mayra Marín, una contadora de 43 años que hace pocos meses conoció el culto.



2 comentarios:

El que calla ante la injusticia y la tiranía, no hace otra cosa que esconder, detrás del silencio, su cobardía.